Es uno de los más importantes núcleos urbanos de Galicia, con una población de 77.950 habitantes. Está situada en el norte de Galicia.
A mediados del siglo XVIII la villa de Ferrol sólo contaba con apenas 2000 habitantes los cuales se dedicaban al marisqueo, la pesca, la salazón y la agricultura.
Aún podemos apreciar este pasado en el barrio de pescadores, con un trazado medieval de calles estrechas e irregulares y con algunas casas de balcones de madera, típicamente marineras.
Fueron los primeros Borbones los que en el siglo XVIII provocarían un cambio crucial para el futuro e historia de la ciudad de Ferrol. Felipe V decide fortalecer la Marina de Guerra y escoge la ría ferrolana por sus inmejorables condicciones tanto geográficas como estratégicas, levantando así en Ferrol la capital marítima del Noroeste peninsular.
En la ensenada de A Graña comienzan las obras de un arsenal y de un pequeño astillero. En 1730 sale el primer navío construído en sus gradas, que lleva el nombre de Galicia.
El rey Carlos III también será crucial para la modernización de la ciudad. Bajo la dirección de diversos arquitectos e ingenieros militares se construye a lo largo de veinte años, dando como resultado los arsenales y el astillero más moderno de España y, durante algún tiempo, de Europa.
En 1751 se echa al mar el primer navío, El Fernando, iniciándose así una actividad constructiva que, con más de doscientos cincuenta años de historia, llega hasta nuestros días con la empresa nacional Navantia, una de las factorías mejor dotadas del mundo para la construcción de buques de guerra y la principal industria de la ciudad.
Debido a la demanda de mano de obra se quedó pequeño el antiguo barrio de Ferrol vello, naciendo así el barrio obrero de Esteiro, para alberbar a la gente obrera del astillero. Su ubicación estaba muy cerca del astillero.
Debido al crecimiento de la población, las obras del recinto militar y las instalaciones de la construcción naval nace el Barrio de la Magdalena, emplazado frente a los arsenales, entre el núcleo pesquero de Ferrol vello y el barrio de Esteiro. Todas ellas estaban destinadas a la clase alta de la ciudad: oficiales de la Marina, técnicos de la construcción naval, funcionarios, artesanos y comerciantes.
Callejero de Ferrol